Emma Roberts: Un Día en la Vida de la Estrella que Brilla por Dentro y por Fuera

 Emma Roberts: Un Día en la Vida de la Estrella que Brilla por Dentro y por Fuera

 

El día de Emma Roberts comienza de manera similar al de cualquier persona; entre la rutina matutina de café, deberes familiares y ejercicio. “No puedo funcionar hasta que no me tomo un café helado o un café con leche. Mi rutina este verano incluye café, dejar a mi hijo en el campamento e ir a New York Pilates o Barry’s Boot Camp”, comparte. Después de esta parte casi ordinaria de su jornada entre los 22 millones de almas que habitan Nueva York, la actriz se adentra en el mundo del espectáculo. Aquí es donde empiezan las actividades menos rutinarias: sesiones de fotos, rodajes, estudio de guiones y grabación de campañas publicitarias, como la reciente colaboración con KIKO Milano. “Estoy muy emocionada de ser parte de esta firma italiana. Siempre me ha gustado el maquillaje y aprecio la filosofía de KIKO: hacer de la belleza algo personal y único. Me sentí empoderada al rodar su campaña. No querían que me pareciera a nadie más que a mí misma”, recuerda.

 

Con su apretada agenda, la actriz de “American Horror Story” comparte sus métodos para relajarse en las horas de la noche. “Hablo por teléfono con mi madre o una amiga, y luego me doy un baño. Me encantan los ‘baños de sonido’ con auriculares; es un reset total que cambia mi energía”. Esta práctica meditative implica sumergirse en sonoridades producidas por instrumentos como gongs o cuencos de cristal. “Para ello, escucho los canales The Spirited Soul o Healing Vibrations en Spotify. También disfruto ponerme una mascarilla facial y sumergirme en una bañera de aceites y sales minerales mientras leo un buen libro”, añade con entusiasmo. En este momento, su lectura es *Érase una vez* de Elizabeth Beller, que la tiene cautivada.

 

Con su trayectoria en la industria del entretenimiento, es natural que Emma haya aprendido algunos trucos de belleza de los expertos. “El maquillaje puede cambiarlo todo. Mis personajes no cobran vida hasta que me maquillo”, explica. Este proceso es integral para muchos actores, y Roberts reconoce la influencia de su madre en su formación estética. “Siempre me encantó el maquillaje. De pequeña, usaba el neceser de mi madre, y una vez me sorprendieron usando su pintalabios rosa (¡ahora descatalogado!) por toda la cara”, recuerda riendo. “Ella siempre me aconsejó usar contorno de ojos desde joven”, continúa.

 

A pesar de su aprendizaje, ambién posee sus propios secretos de belleza: “Me gusta contornear mi nariz y mejillas, especialmente en verano. Y practicar pilates al menos dos veces por semana transforma tu cuerpo y mente. También disfruto salir a cenar sin el teléfono; ¡es muy liberador!”.

 

El neceser de belleza de Emma Roberts está cuidadosamente curado. Solo incluye sus productos esenciales, aquellos que la acompañan sin importar dónde esté. ”Busco constantemente la perfección en mi neceser de viaje, aunque creo que aún no lo he conseguido. Para mí, lo más importante son los elementos básicos: la máscara de pestañas Maxi Mod de KIKO, parches para las ojeras, corrector y labios rojos. El Brillo

 

Fuente: Vogue España