
El Mes del Orgullo: Una historia de lucha y celebración
Junio marca el inicio del Pride, un período de conmemoración y reivindicación que destaca en todo el mundo, honrando la disputa por los derechos de la comunidad LGBTQIA+. Más allá de los desfiles y festivales, esta temporada es un recordatorio de un pasado marcado por la discriminación y una firme determinación por la igualdad, con sus raíces en protestas que exigieron el reconocimiento de las libertades para personas de todas las orientaciones sexuales.
Las bases de este movimiento global iniciaron a mediados del siglo XX, especialmente en Estados Unidos, donde las relaciones entre personas del mismo género eran consideradas ilegales y la “discriminación institucionalizada” era una realidad de esa época. Por su parte, en la década de 1950, comenzaron a surgir los primeros momentos de lucha, con individuos y pequeños grupos alzando la voz contra lo que consideraban una injusticia.
El punto de mayor relevancia llegó en la madrugada del 28 de junio de 1969. La policía irrumpió en el Stonewall Inn, un bar donde asistían personas de la comunidad gay en Greenwich Village, Nueva York. Sin embargo, en lugar de aceptar la realidad de siempre, la comunidad LGBTQIA+, cansada del acoso, se levantó en una protesta que se extendió por tres días. Estos enfrentamientos, conocidos como los “Disturbios de Stonewall”, se convirtieron en una herramienta para el movimiento moderno por los derechos de los homosexuales, dando inicio a una lucha que se mantiene hasta la actualidad.
Inspirados por otros movimientos de derechos civiles de la época, como el que luchaba por los derechos de los afroamericanos, se crearon organizaciones que serían claves para poder alcanzar sus objetivos. Una de las más influyentes fue el “Frente de Liberación Gay”, que promovió la visibilidad de la comunidad en esa fecha.
Apenas un año después de los disturbios, el 28 de junio de 1970, se llevó a cabo la primera marcha del Orgullo en Estados Unidos. Este evento no solo conmemoró el primer aniversario de «Stonewall», sino que también estableció una tradición que se extendería por todo el mundo. Asimismo, el término «Pride» no fue una elección a la suerte, este se le atribuye a Brenda Howard, activista y bisexual, reconocida como la «Madre del Orgullo», quien organizó este primer desfile con el simple objetivo de que todos los que asistieran tuvieran la oportunidad de expresarse libremente.
Desde entonces, el mes del Orgullo ha evolucionado, de ser una conmemoración por el alzamiento de Stonewall, hasta transformarse en una celebración de la diversidad, un espacio para educar sobre las realidades de la comunidad y en una plataforma para la defensa de sus derechos. Cada junio, desde todas partes del mundo se unen para recordar que el “Pride” no es solo una conmemoración, sino un testimonio de la búsqueda de aceptación y respeto para todos por igual, según reseña msn.com