
La Virgen de Coromoto: la historia de la Patrona de Venezuela
Cada 11 de septiembre, el país caribeño se viste de devoción para honrar a su patrona, la cual fue proclamada por el Papa Pío XII en el año 1952. Esta fecha marca la coronación canónica de la imagen mariana, un momento significativo para millones de venezolanos que encuentran en su narrativa una fuente de esperanza y milagros.
La historia de la Virgen de Coromoto es un relato que fusiona la fe con la narrativa de los pueblos originarios de Venezuela. Cuando hablamos de su origen, este se remonta a 1591, con la llegada de los colonizadores españoles a tierras llaneras. En un intento por mantener sus tradiciones, la tribu de los Cospes decidió reubicarse en la selva. Sin embargo, en 1651, el cacique Coromoto tuvo una visión que cambió el destino de su pueblo. Una mujer, que se deslizaba sobre el agua y sostenía a un niño, se le apareció y le encomendó una misión: que tanto él como su tribu se acercaran a los españoles para recibir el «agua de la bendición» y así poder alcanzar el cielo, pero Coromoto se negó a seguir su petición.
La segunda aparición tuvo lugar el 8 de septiembre de 1652, cuando la Virgen se presentó en la choza del cacique. En un acto de rebeldía, intentó atacarla, pero la Virgen desapareció. Sin embargo, un rastro de su presencia quedó para consolidar esta historia: una pequeña estampa de 27 mm por 22 mm con su imagen y la del Niño Jesús. Este pedazo de papel de seda, que el cacique guardó en su mano, se convirtió en la reliquia que actualmente se venera como la original y que, a pesar de sus dimensiones, muestra un detallado dibujo que resalta la serenidad de la virgen.
Por su parte, la veneración a la Virgen de Coromoto creció con el paso de los años, consolidándose como un símbolo de la identidad nacional. El 7 de octubre de 1944, el Papa Pío XII la declaró oficialmente Patrona de Venezuela, y el 11 de septiembre de 1952, la imagen fue coronada en una ceremonia solemne que congregó a miles de devotos.
El Santuario Nacional de la Virgen de Coromoto, un lugar de peregrinación, fue nombrado basílica en 1949, convirtiéndose en un epicentro de la devoción mariana en el país. En este lugar, miles de peregrinos acuden cada 11 de septiembre para dar gracias, pedir favores y reafirmar su fe en la protectora de su nación, según reseña Ewtn.com