
El Taekwondo: de la tradición coreana al podio olímpico
El 4 de septiembre se convierte en un día especial para los fanáticos de las artes marciales. En esta fecha se celebra el día internacional de un deporte que ha logrado conquistar los escenarios deportivos a nivel mundial, es por ello que se conmemora su reconocimiento como disciplina olímpica desde 1994. Más allá de su estatus en el podio, esta práctica representa una fusión de fuerza, agilidad y una rica herencia cultural.
Aunque el nombre «taekwondo» fue acuñado en 1955, su historia comenzó hace miles de años en Corea del Sur. Sus raíces se entrelazan con el taekkyon, una práctica marcial que ya se documentaba alrededor del 50 a.C. El nombre mismo es una ejemplificación de principios: Tae (acción de pie), Kwon (acción de mano) y Do (arte o camino). Juntos, estos términos no solo describen con exactitud las técnicas de combate, sino que también hacen referencia a la disciplina mental y espiritual que cada practicante debe tener.
Un camino marcado por los triunfos
En 1963, tuvo su debut oficial en un evento atlético en Corea, marcando el inicio de una exhibición que impulsaría este deporte. Sin embargo, la verdadera popularidad global llegó en 1973 con el Primer Campeonato Mundial en Seúl, donde atletas de todo el mundo se enfrentaron por primera vez, demostrando el potencial de esta disciplina, según reseña Cultura, arte y deporte.
Su camino hacia los Juegos Olímpicos fue un recorrido donde triunfó la perseverancia. En 1988, el taekwondo fue presentado como deporte de exhibición en los Juegos Olímpicos de Seúl. Con 183 atletas de 34 países participando, este evento impulsó y demostró al mundo su capacidad para competir al nivel de otras disciplinas.
El momento destacado llegó en los Juegos Olímpicos de Sídney 2000. El taekwondo fue reconocido como un deporte olímpico oficial, un momento que aseguró su lugar entre las disciplinas más importantes del mundo. La inclusión no solo representaba su popularidad, sino que también lo elevó a un escenario donde sus atletas podían aspirar al éxito deportivo.

La celebración del Día Internacional del Taekwondo cada 4 de septiembre es un recordatorio de un logro que con perseverancia se alcanzó, un tributo al trabajo de generaciones de maestros y atletas que han dedicado sus vidas a representar este arte y llevar el deporte y la disciplina a millones de niños y jóvenes en todo el mundo, según reseña Infobae.com
