Día Mundial contra la Hepatitis: una enfermedad silenciosa
Está iniciativa promovida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) busca destacar el impacto de estas patologías hepáticas mientras impulsa la realización de pruebas de detección a tiempo y la facilitación de un mayor acceso a los tratamientos efectivos. Asimismo, la elección de este día no es casual, rinde homenaje al nacimiento del profesor Baruch Samuel Blumberg, el científico que descubrió el virus de la hepatitis B y fue galardonado con el Premio Nobel por su contribución a la medicina.
Según la Alianza Mundial contra la Hepatitis, más de 300 millones de personas viven con hepatitis viral. Sin embargo, la verdadera alarma es que la gran mayoría desconoce su estado. Ignorar los síntomas de esta patología podría complicar aún más a los pacientes, no solo por el hecho de no recibir tratamiento, sino por el avance de la enfermedad, el cual puede resultar en complicaciones mayores. «La mayoría de estas personas desconocen su infección y continúan siendo portadoras del virus. Por lo tanto, presentan un alto riesgo de desarrollar una enfermedad hepática crónica grave y pueden transmitir el virus a otras personas sin saberlo», afirma la OMS
Como reconocer si padezco esta enfermedad
Las hepatitis virales son infecciones que causan la inflamación del hígado, un órgano vital para numerosas funciones corporales. Su origen se basa en su capacidad para permanecer silenciosas durante años, sin manifestar síntomas evidentes. Esto significa que una persona puede estar infectada y transmitir el virus sin siquiera saberlo, llevando a un diagnóstico tardío cuando el daño hepático ya es considerable.
Según la Organización Mundial de la Salud: “las hepatitis virales B y C representan importantes problemas de salud y son causas fundamentales del cáncer de hígado. En la Región Europea de la OMS, se estima que 15 millones de personas viven con hepatitis B crónica y 14 millones con hepatitis C».

Una enfermedad discreta
Cuando los síntomas aparecen pueden ser variados, lo que dificulta su identificación temprana. Es por ello que debemos tener en cuenta algunas señales que indican el padecimiento de esta patología, entre estos se incluyen fiebre, fatiga persistente, dolor abdominal, vómitos, orina oscura, heces claras y coloración amarillenta de la piel y los ojos. Estos pueden presentarse en diferentes tiempos dependiendo de la condición del paciente. Sin embargo, los síntomas solo se vuelven notorios cuando el daño hepático ya es grave.
Ante esta situación la OMS y otras organizaciones de salud global como NIH enfatizan la necesidad de realizar controles, incluso en ausencia de molestias. La detección a tiempo es la clave para un tratamiento efectivo, permitiendo frenar la progresión del virus.
En este Día Mundial contra la Hepatitis, el objetivo principal es informar y enseñar los riesgos de esta enfermedad silenciosa. Solo a través de la concienciación y la acción podremos erradicar esta epidemia y proteger la salud de millones de personas a nivel global, según reseña Infobae.com
