VIVE POR LO QUE TE APASIONA, VUELA ALTO «CHIVITA»

Hablar de Jesús “Chivita” Lezama es hablar de beisbol, y más si mencionamos a la divisa más ganadora de nuestra pelota, Los Leones del Caracas.

La tristeza que embargó a los seguidores del 21 veces campeón del país la partida del fanático número uno de nuestra pelota rentada.

Vale destacar que también el luto lo han manifestado las demás divisas y sus seguidores.

«Chivita» como se le conocía o como el hombre de la corneta disfrutó los 21 títulos del Caracas, 3 como Cervecería y 18 como Leones.

Y bien merecido tenía el título de seguidor número uno, estuvo toda la vida apoyando a la novena caraqueña en las temporadas profesionales.

Algo que disfrutamos desde su fundación y creación de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional.

Yo diría, y perdón por hacer esto en primera persona, que no hubo partido que no fuera nuestro pitcher abridor.

Y es porque Lezama no había partido en que al interpretar las gloriosas notas del himno nacional no se subiera a la lomita del universitario.

Con su mano de gomaespuma, señalando al cielo y la bandera nacional abriendo el juego y diciendo que se ganaría con él en la lomita.

Era el protagonista en sus estadios, desde el Cervecería en San Agustín hasta el Universitario donde le dieron el último adiós familiares, amigos y afición.

No hubo quien no lamentara la partida de «Chivita», se metió en el corazón de los profesionales, directivos y fanáticos del beisbol, fue una leyenda.

Un momento memorable, narrado por Mary Montes en el programa Shirley Varnagy fue cuando Lezama fue expulsado del estadio por los fanáticos de los Tiburones.

Le dijeron que era mascota del equipo irrespetando su fanatismo, eso enfureció al «Chivita» quien les hizo la cruz. Podrá ser una de las maldiciones del beisbol.

Varnagy comentó en su programa radial que Chivita le dijo a la fanaticada de los Tiburones que más nunca ganarían una final.

Qué casualidad, esta última final fue Caracas vs La Guaira y previa a esa final él le hizo ese comentario a ella y así sucedió.

Será que la maldición de «Chivita» se convertirá en una sentencia por décadas.

Así como las de Babe Ruth a Boston o la de La Cabra de los Cachorros de Chicago, amanecerá y veremos. Recordando que los Tiburones llevan 36 años sin ganar un campeonato.

A Boston le costó 85 años y a Chicago 108 para volver a saborear las mieles de un título.

Fueron 104 años de fanatismo al beisbol, que nos deja una hermosa moraleja de vida y es que “Vive por lo que te apasiona”.

Y es lo que dejó Jesús “Chivita” Lezama al beisbol en Venezuela.

Esperamos pronto sea exaltado al Salón de la Fama del Beisbol Venezolano, y por qué no, del Caribe también.

Una persona que no solo dio todo por nuestra pelota local sino es un digno ejemplo fanatismo a su club en todo el mundo.

Muchas Gracias Lezama, te vas dejando un legado enorme no solo para los tuyos sino para todos los que compartieron los terrenos de juego contigo.

Centauri Magazzine te despide con la mano en alto

Señalando el cielo y esperando que desde lo mas alto sigas apoyando al beisbol y a tus gloriosos Leones del Caracas, vuela alto «Chivita».