Los santos del 2025: Pier Giorgio Frassati modelo de santidad

Los santos del 2025: Pier Giorgio Frassati modelo de santidad

La vida de este joven turinés fallecido en 1925, continúa inspirando a católicos de todo el mundo, siendo reconocido por la Iglesia como un modelo de fe y compromiso social.  Nacido en 1901 en una familia destacada de la región, Frassati, lejos de las influencias económicas de su posición, optó por vivir su fe a través de la caridad con aquellos menos favorecidos, ganándose el apodo de “El hombre de las Bienaventuranzas” por parte de San Juan Pablo II. Sin embargo, en julio de 1925, a la edad de 24 años, el italiano contrajo poliomielitis. Se especula que el contagio ocurrió mientras servía a los enfermos en los barrios pobres de la ciudad, en un acto final de entrega.

Desde su juventud, la vida de Pier Giorgio se caracterizó por su servicio a los más necesitados. Asistía a misa diariamente y dedicaba su tiempo a ayudar a los enfermos de su comunidad. Su fe fue la fuerza que lo impulsaba a involucrarse en diversas organizaciones de apostolado. Fue miembro de la Sociedad de San Vicente de Paúl y de Acción Católica, utilizando su entusiasmo para impactar positivamente a aquellos que lo rodeaban.

La ruta hacia la santidad

El camino a la canonización de Pier Giorgio Frassati ha estado marcado por la aprobación de dos milagros, lo que destaca su intercesión:

El primero fue reportado en 1933, apenas ocho años después de su muerte. Domenico Sellan, un hombre que padecía tuberculosis, experimentó una sanación inexplicable tras recibir una estampa de Pier Giorgio y rezar pidiendo su intercesión. La Iglesia investigó el caso y, en 1989, fue aprobado oficialmente. Este reconocimiento culminó con la beatificación de Pier Giorgio Frassati por San Juan Pablo II en 1990, quien lo proclamó un “hombre de las Bienaventuranzas”.

El segundo milagro, fundamental para su canonización, fue confirmado por el Papa Francisco en 2017. Se trata de la curación de Juan Manuel Gutiérrez, un seminarista que sufrió una lesión en el tendón de Aquiles. A pesar de no tener una devoción hacia Pier Giorgio, Gutiérrez decidió realizar una novena pidiendo la ayuda del beato. Su sanación fue catalogada como milagrosa por la ciencia médica y reconocida por la Iglesia como un acto de intercesión.

En esencia, con dos milagros aprobados y una vida que se expone como un ejemplo de la Doctrina Social de la Iglesia y la alegría evangélica, la canonización de Pier Giorgio Frassati el pasado 7 de septiembre consolida su lugar como un patrono e intercesor de la juventud, según reseña Infobae.com