Federico y Mary: Un Nuevo Capítulo Real Comienza en Dinamarca

Este domingo marcó un hito en la historia danesa cuando Federico de Dinamarca fue proclamado como el nuevo Rey en una ceremonia emotiva que tuvo lugar en el balcón del Palacio de Christiansborg, ante una multitud entusiasta de ciudadanos. La primera ministra, Mette Frederiksen, dirigió unas palabras a la expectante muchedumbre antes de presentar al recién coronado monarca, quien, vistiendo un impecable uniforme militar de gala y con lágrimas en los ojos, ascendió al trono después de que su madre firmara la declaración de abdicación en una reunión del Consejo de Estado, apenas una hora antes de su primera aparición en público como Federico X.

Tras la proclamación, que tuvo lugar a las 15:00 horas, el príncipe Federico tomó la palabra revelando el lema que guiará su reinado, una tradición arraigada desde el siglo XV. La frase elegida, «Unido, comprometido por el reino de Dinamarca», encapsula los valores y el espíritu que el nuevo monarca se propone defender. En una intervención emotiva, el Rey compartió sus reflexiones sobre los 52 años de reinado de su madre, la reina Margarita II, destacándola como una soberana extraordinaria. Expresó su esperanza de convertirse en el rey unificador del mañana, asumiendo la responsabilidad con respeto, orgullo y alegría, y solicitó el apoyo de su amada esposa, su familia y el pueblo danés.

Un saludo de 27 salvas desde Battery Sixtus en Holmen, Copenhague, marcó el cierre de este emocionante momento. Casas Reales europeas, incluyendo la de Felipe VI de España, el rey Carlos Gustavo de Suecia y Harald de Noruega, extendieron sus felicitaciones a los nuevos Reyes, subrayando la importancia de este acontecimiento y la fortaleza de las relaciones entre las naciones.

Posteriormente, el Rey Federico X, acompañado de su esposa, la reina Mary, viajó en carruaje desde Christiansborg hasta el Palacio de Federico VIII en Amalienborg, escoltados por un escuadrón a caballo del regimiento de la Guardia. Ciudadanos y turistas tuvieron la oportunidad de saludar y admirar a los nuevos monarcas, mientras que sus hijos siguieron en vehículos históricos a motor. A las 17:00 horas, se llevó a cabo el traslado de los estandartes reales desde el Palacio de Christian IX al Palacio de Federico VIII en Amalienborg, marcando un simbólico momento en esta jornada histórica.

Antes de salir al balcón, la Casa Real danesa compartió el primer retrato oficial del nuevo Rey y desveló el monograma real, compuesto por dos F entrelazadas con una X que simboliza el número 10. Este símbolo, elegido por el Rey y diseñado por el experto heráldico Ronny Skov Andersen con la ayuda del artista digital Stefan Laegaard, gradualmente reemplazará al de la reina Margarita en guiones reales y escudos de las Fuerzas Armadas.

La fórmula de proclamar desde el balcón del Palacio, remontándose a la antigüedad, cuando se anunciaba el cambio de trono en consejos abiertos en diferentes partes del país, continúa siendo una tradición arraigada en Dinamarca. Desde 1849, los nuevos reyes son proclamados desde el castillo de Christiansborg, siendo esta balconada el lugar desde el cual se anuncia el traspaso de la Jefatura del Estado. En dos ocasiones históricas, la proclamación del nuevo Rey se realizó desde Amalienborg, evidenciando la adaptabilidad de las tradiciones frente a circunstancias excepcionales. La jornada deja una huella imborrable en la memoria danesa, marcando el inicio de una nueva era bajo el reinado de Federico X y la reina Mary.